El arte de balancear familia, negocio y fe sin perderte a ti misma
- Agence web AISOFTMTL
- 31 mar
- 3 Min. de lectura

¿Alguna vez has sentido que vives apagando fuegos todo el día? Los platos sucios te miran feo desde el fregadero, los niños están peleando por el último yogur, y tú, en medio de todo, tratas de responder un correo importante con una mano mientras con la otra calientas el almuerzo.
Ah, y aún no has hecho tu devocional. Ni comido bien. Ni lanzado ese curso que tienes meses planificando.
Tranquila. Te entiendo.
¿La mujer maravilla? No, gracias.
Nos vendieron la idea de que podíamos con todo. Y sí, podemos mucho, pero no todo al mismo tiempo. El multitasking suena bonito hasta que un día te descubres llorando en silencio en un rincón de tu casa porque sientes que das tanto a todos, pero te estás olvidando de ti.
Porque, seamos honestas:
¿Cuántas veces pospusiste tu emprendimiento por priorizar todo lo demás?
¿Cuántas veces te sentiste culpable por trabajar en tu negocio cuando tus hijos te pedían jugar?
¿Y cuántas veces oraste pidiéndole a Dios dirección, pero la voz más fuerte era la de tu propio autoexigencia?
La trampa de la mujer “todo terreno”
A veces creemos que si no hacemos todo perfectamente, no estamos siendo buenas madres, buenas cristianas o buenas emprendedoras. Pero el perfeccionismo no viene de Dios. Viene del miedo.
Miedo a no ser suficiente. Miedo a que tu negocio fracase. Miedo a decepcionar a los tuyos.
Y mientras más tratas de controlarlo todo, más te desconectas de ti. De esa voz interior que alguna vez soñó con emprender no solo por dinero, sino por propósito.
El verdadero balance no es simetría
No se trata de dividir tu día en tres partes iguales: familia, negocio y fe. Se trata de honrar cada temporada.
Habrá días en que tus hijos te necesiten más. Otros, en los que tu negocio te pida foco. Y otros, en los que simplemente necesites apagar todo y sentarte a los pies del Señor, en silencio.
¿Sabes qué? Está bien. No estás fallando. Estás creciendo.
La clave: no perderte a ti misma
Tú eres el eje. El motor. El corazón de todo lo que haces. Si tú no estás bien, tu negocio no fluye, tu casa se tensa, tu fe en Dios se enfría. Y no se trata de ser egoísta, se trata de ser sabia.
Haz espacio para ti. Para respirar. Para soñar. Para equivocarte y volver a empezar.
Porque sí, es posible emprender con propósito sin perder tu esencia en el intento
Y lo mejor de todo: no tienes que hacerlo sola.
Yo también pasé por esa etapa en la que sentía que debía elegir entre ser mamá presente, emprendedora con propósito o mujer de fe. Hasta que descubrí que no se trata de elegir, sino de integrar.
Por eso hoy quiero contarte de una academia que puede marcar un antes y un después en tu camino: la (Digital Business Academy) DBA de Yeniffer Villasmil. Es mucho más que una academia; es una comunidad donde descubrirás las herramientas, estrategias y mentorías necesarias para llevar tu negocio digital al siguiente nivel. Aprenderás a crear contenido impactante, gestionar redes sociales de forma efectiva y aprovechar herramientas digitales para ahorrar tiempo y maximizar resultados.
Si sientes que ha llegado el momento de emprender de verdad, con estrategia y sin desconectarte de lo que eres, te invito a probarla. Dale una oportunidad a tu llamado. Conecta con mujeres que, como tú, quieren impactar sin dejarse de lado.
👉 O escríbeme si tienes dudas y quieres saber si es para ti.
Tú también puedes construir un negocio que te refleje y te honre. Y lo más hermoso: sin perderte a ti misma en el proceso.
Comentários